Mostrando entradas con la etiqueta Un vago recuerdo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Un vago recuerdo. Mostrar todas las entradas

13 agosto 2022

Un vago recuerdo

Recuerdo que hasta hace aproximadamente un año, había un blog que actualizaba por día y; casi todas sus publicaciones le respondía con una anécdota, a veces intentaba no hacerlo, pero su dueño me daba la confianza para continuar. Días atrás hice un comentario a otro blog que me provoca lo mismo. Esta publicación  viene a colación por sugerencia del compañero bloggero, inició como un mensaje a su post y ahora, aquí lo dejo.


Hay un bosque, tiene aproximadamente doscientos años, se encuentra ubicado en el centro de la ciudad, anteriormente quedaba en las afueras pero al extenderse y aumentar la población terminó justo entremedio. Un pequeño tren lo recorre iniciando en el interior y hacía afuera para finalizar donde inicio. 

Para hacer más interesante el tour pasa cerca del borde de zanjas, pendientes, pozos y desniveles. Dicho tren tiene una réplica a escala de la campana de dolores [ni idea a quien se le ocurrió], he de confesar que es preciosa. Pues esta mujer es muy curiosa y gusta de toquetear todo. 

Un día, hace un montón de ayeres y sin pensar en nada, vi venir el tren y creo que en ese momento se me cruzaron los leones, porque toqué la campana pero, obviamente la campaña estaba sujeta por un tubo metálico que se extendía hacia afuera, me dio un golpe tremendo en la espalda, me empujo y salí volando un par de metros, estrellándome contra una mujer curvi plus+plus.

Ella, como buena samaritana [involuntaria] sostuvo mi vuelo, a su vez, la mujer curvi plus+plus fue a caer en un pozo de aproximadamente tres metros; y como no podía levantarse, llamaron a los bomberos, éstos al llegar la pusieron a salvo, [he de decir que salió ilesa].

Al principio, [por su mirada], creo que dijo en su mente hasta de lo que me iba a morir, pero luego, al verse rodeada de esos hombres fortachones, solo se dejó querer, olvidándose completamente de mí.

El golpe en mí fue tan fuerte y la hinchazón enorme, que podía ponerme el escote perfectamente hacía adelante o hacía atrás y no había diferencia.